De manos de Jdk nos llega esta magnifica reseña del juego...
La Catedral, lugar de culto para los aldeanos, constituye el corazón de la ciudad, rodeada por sus murallas. Los más ricos intentaran adueñarse de la ciudad mediante el posicionamiento estratégico de sus edificios en el interior de las murallas.
CAYRO games nos trae esta reedición del juego clásico CATHEDRAL, un juego para dos jugadores.
1 tablero central rodeado por murallas, dividido en cuadriculas.
1 Catedral (de color gris).
28 edificios en dos colores (14 para cada jugador)(El Castillo, La Mansión, La Abadía, La Plaza, La Plaza, El Torreón,El Hospital, El Puente, 2 posadas, La Universidad, 2 Tabernas y 2 Establos).
Libro de reglas en 4 idiomas, incluido en español.
Comienza a jugar, el jugador que haya elegido el color blanco, colocando en primer lugar la Catedral en cualquier parte del tablero, haciéndolo coincidir con las cuadriculas del tablero. A continuación coloca su primer edificio el jugador de color marrón.
Alternándose cada vez entre los jugadores irán colocando de uno en uno sus edificios en el tablero de juego.
Cada edificio tiene una forma diferente, recordando a las figuras del TETRIS.
El objetivo es colocar el máximo posible de edificios dentro del tablero de juego, intentando cerrar un trozo de terreno, colocando los edificios de forma que se toquen al menos por uno de sus lados, ya que no es válido que solo se toquen por sus esquinas y que a su vez estén tocando las paredes de las murallas.
Al cerrar un terreno, ese territorio pasar a ser del jugador y solamente él, podrá colocar fichas en su interior. Si al cerrar el terreno se encuentra la Catedral esta se retira del juego, o si se encuentra un edificio del otro jugador, este edificio se retira y se la devuelve al jugador. El edificio retirado se podrá a volver a poner en juego más tarde, mientras que la Catedral una vez retirada no vuelve a entrar en el juego. Si al cerrar un terreno se encuentran dos edificios, uno de ellos puede ser la Catedral, el terreno no podrá reclamarse, por lo que no pertenece a nadie y si aun hay espacios libres, se podrán colocar en su interior edificios cualquier jugador.
El juego termina cuando ninguno de los dos jugadores puede seguir colocando más edificios en el tablero de juego.
El ganador de la partida es aquel jugador que tiene de sus edificios sobrantes, menos cuadriculas.
Se recomienda jugar a dos rondas, e intercambiando entre los jugadores los colores para así, comenzar cada ronda un jugador distinto. El ganador será, el jugador que entre las dos rondas haya conseguido menos puntos.
En definitiva, un juego de puzzle muy recomendable para dos jugadores. Las partidas son muy rápidas, unos 10 minutos, y el acabado del juego es toda una delicia, con el tablero y las figuras de los edificios en madera.
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